Un extraño y preocupante incidente ha tenido lugar hace unos días cuando una persona consiguió viajar desde Copenhague hasta Los Ángeles sin billete de avión y sin ninguna documentación encima.
Incidente en un vuelo de SAS
Todo ocurrió a bordo de un avión de SAS en un vuelo que iba a ser un vuelo más de rutina entre Copenhague y Los Ángeles. La tripulación sospechó de un pasajero que cambió varias veces de asiento y deambulaba por el avión, pero no era nada que no hubieran visto en otros vuelos.
Sin embargo, cuando el avión llegó al aeropuerto Internacional de Los Ángeles, se descubrió que esta persona en realidad no tenía billete para ese vuelo y tampoco ninguna identificación encima. Las autoridades norteamericanas fueron alertadas y comenzaron la investigación, realizando un interrogatorio a esta persona que dijo no recordar como llegó al avión ni qué hacía en Los Ángeles.
También se inspeccionó su teléfono móvil en busca de alguna pista, aunque no han trascendido más detalles sobre este apartado. Del pasajero se sabe que tiene nacionalidad ruso-israelí y que accedió sin problemas al avión en el aeropuerto de Copenhague. Fue devuelto a Dinamarca en uno de los siguientes vuelos disponibles.
El aeropuerto de Copenhague en el punto de mira
Aunque como es normal las pesquisas siguen en Estados Unidos, en el aeropuerto de Copenhague se ha abierto otra investigación para determinar como esta persona ha podido acceder a un avión comercial sin ninguna identificación ni billete.
Se han revisado los vídeos de las cámaras de seguridad y se descubrió al «pasajero» pasando por el control de seguridad del aeropuerto de Copenhague sin billete y sin mostrar ninguna identificación. Posteriormente hizo lo mismo en la puerta de embarque. Las autoridades locales están investigando ya el caso, pero además también lo está investigando la dirección del aeropuerto para descubrir el fallo y aumentar la seguridad del aeropuerto.
Realmente se han producido tres fallos de seguridad en cadena en el aeropuerto de Copenhague, puesto que el primer fallo está en el control de seguridad del aeropuerto, el segundo en las propias instalaciones aeroportuarias, en la puerta de embarque hacia el avión y, el tercer fallo, en el propio avión por parte de la tripulación que mira y pide los billetes para embarcar.
Se desconoce cuáles pudieron ser las intenciones de esta persona y, por suerte, no pasó nada. Pero esto sin duda es un grave fallo en la seguridad del aeropuerto y de la propia aerolínea, dado que una persona estuvo a bordo del avión durante más de 10 horas sin que nadie se diera cuenta de que no debía estar ahí. Según el FBI, esta persona no tenía comprado ningún billete para entrar a los Estados Unidos por ningún aeropuerto ese día.