Pocas veces los pasajeros se dan cuenta de lo que lleva un avión en sus bodegas durante un vuelo con pasajeros. Quizás tampoco se imaginaron esta vez que un oso sería su compañero de viaje y desde luego que la sorpresa para los operarios de Dubái fue mayúscula.
Vuelo...y oso
Los hecho ocurrieron a bordo del vuelo IA123 de Iraqi Airways del pasado viernes día 4 de agosto. Poco antes de las 10 de la mañana despegó desde Bagdad, la capital de Irak, el Boeing B737 MAX 8 con matrícula YI-ASM para realizar el vuelo de poco más de dos horas a Dubái.
El vuelo transcurrió de forma normal e incluso recuperó algo de tiempo, pues a pesar de haber despegado con casi media hora de retraso, el avión llegó al destino solo 10 minutos después de la hora prevista. Eso sí, con una sorpresa.
La tripulación de vuelo solicitó a las autoridades del aeropuerto de Dubái ayuda para sedar al oso y poderlo sacar del avión. De momento se desconoce en qué momento exacto del vuelo el oso consiguió salir de su jaula y se puso a deambular por la bodega del B737, pero se sabe que esto se produjo en algún momento del vuelo.
Una situación única
A la llamada de auxilio acudieron autoridades acudieron los especialistas de flora y fauna del aeropuertos quienes finalmente pudieron retirar el oso de la bodega con toda seguridad. Aunque, en un video difundido en redes por empleados de rampa del aeropuerto de Dubái se puede ver a los mismos acariciando a un oso joven cuando aún estaba en la bodega.
Por supuesto después de sacar del avión a este «pasajero», hubo que realizar una inspección al mismo para asegurarse de que no había causado daños dentro de la bodega del avión, a los sistemas eléctricos o a cualquier otro elemento de la bodega.
The bear got out of the cage and caused a delay in the Dubai-Baghdad flight. pic.twitter.com/wEsQoR1D3M
— Sprinter (@Sprinter99800) August 6, 2023
Finalmente no se encontró ningún daño y el vuelo IA124 salió desde el aeropuerto de Dubái con 4 horas de retraso. La compañía se disculpó con los pasajeros afectados con una publicación en sus redes sociales en la que achacaban el retraso a motivos «ajenos a su voluntad». En un posterior comunicado, la aerolínea aseguró que el transporte del oso se realizó siempre atendiendo a las normas CITES y de la propia IATA.