Como ya anunciábamos hace varias semanas en este artículo, SAS ha retirado su último Boeing 737 y lo ha hecho con un vuelo muy especial.
SAS se despide de 30 años de historia
El primer Boeing 737 llegó a la flota de la compañía en 1993, desde entonces, más de 120 unidades diferentes han pasado por la flota de la aerolínea, que ha empleado estas aeronaves tanto a los rincones más lejanos del norte de la península escandinava como a soleados destinos vacacionales del sur de Europa.
Cosa poco habitual hoy en día donde prima el ecologismo y el ahorro de combustible, SAS ha decidido despedir a sus Boeing 737 como se merecen, con un buen homenaje cargado de pequeños detalles.
El vuelo ha tenido lugar el pasado 19 de noviembre y, para empezar, el número de vuelo no podía ser otro que SAS737 operado por el Boeing 737-700 con matrícula LN-RRB, un avión de poco más de 16 años y que es también el avión de la fotografía principal de este artículo.
Las tres capitales escandinavas
El vuelo SAS737 ha tenido lugar entre Estocolmo (capital de Suecia) y Oslo (capital de Noruega), pero el vuelo no ha cubierto el trayecto más corto, sino que han optado por una ruta un poco (bastante, en verdad) más larga. El avión ha realizado una pasada baja sobre Copenhague, la capital de Dinamarca.
Antes de aterrizar en Oslo, la tripulación del avión dibujó en el cielo el número 700, en referencia al modelo de avión y posteriormente aterrizó en Oslo, convirtiendo un vuelo de unos 40 minutos en uno de 2 horas y 35 minutos que ha servido como un buen punto y final a la trayectoria del popular 737 en la aerolínea escaninava.